
Es una técnica indolora, suave, ritmica y lenta, que te lleva a una profunda relajación, a veces al sueño, por este motivo es fantastica para el estrés, aunque se aplica principalmente cuando hay obstrucciones en los vasos linfáticos debido a traumatismos, inflamaciones, cicatrices e intervenciones quirúrgicas.
Maravillosa cuando hay retención de líquidos durante el embarazo, con la tipica hinchazon de tobillos, piernas, etc.
El drenaje linfático es uno de los tratamientos más indicado en caso de celulitis, ya que los acúmulos de grasa localizados principalmente en las piernas, caderas y glúteos, comprimen los vasos linfáticos dificultando la circulación de la linfa, aumentando la fragilidad de los capilares sanguineos, presentandose en algunos casos hematomas a la mínima presión.
Me resulta gracioso escuchar a las personas, que por primera vez se hacen drenaje linfatico, ya que por la suavidad de la técnica preguntan ¿pero esto hace algo?, y yo siempre les digo: "confia, disfruta y cuando acabe la sesión tú misma responderás a tu pregunta". Y así es, quedan encantadas con los resultados.
Isa
2 comentarios:
Recuerdo cuando estudiábamos que ciertamen te parecía que no hacíamos ni nos hacían nada, pero es tan agradable. Hay que ser persistente con esta técnica, para que actúe, bien. Antonia
Apreciada Isa:
El drenaje linfático es una técnica excepcional que todo terapeuta debería conocer.
UN abrazo.
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